El Global Engagement Index (GEI), analiza las condiciones laborales que motivan a los trabajadores del mundo. Su más reciente estudio dejó en evidencia que sólo el 19% de los trabajadores de los distintos países, se sienten motivados en su trabajo.
Por lo mismo, conocer los factores laborales que potencian el sentido de pertenencia y engagement de las personas es una herramienta que mejorará no solo los resultados de la empresa, sino que, aún más importante, es clave para mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
Existen beneficios que van más allá de los incentivos monetarios y que mejoran significativamente la experiencia diaria en el ambiente laboral, lo que se traduce en trabajadores más felices y motivados.
1- Desarrollo profesional: Ofrecer desarrollo dentro de la empresa, acompañado de nuevas oportunidades de formación profesional, demuestra un interés de los empleadores en mantener a los colaboradores a largo plazo y a la vez, ellos se sentirán más apreciados y motivados.
2- Nuevas responsabilidades: Comunicarles a los empleados su posición dentro de la empresa, estableciendo su importancia para el equipo de trabajo, puede realizarse asignándoles tareas de mayor responsabilidad e importancia. Con esto, se aumenta la fidelidad del colaborador a la vez que se le da una mayor autonomía en sus labores.
3- Ambiente laboral: Un aspecto muy importante para la calidad de vida de los colaboradores, es el ambiente de trabajo en el cual realizan sus tareas diarias. Crear un ambiente de trabajo en el que disfruten y se sientan cómodos puede lograrse mediante sugerencias de ellos mismos sobre sus necesidades diarias, dejando en claro que sus opiniones y bienestar son temas vitales para la empresa.
4- Todos importan: Subrayar las fortalezas de cada miembro del equipo de trabajo y dejar en claro las diferencias positivas entre cada uno de sus integrantes, llevará a los colaboradores a sentirse más valorados y responsables en la empresa, estableciendo que cada uno es vital para el logro de las metas.
En conclusión, la motivación laboral reside en gran parte en establecer un ambiente colaborativo, haciendo partícipe a los colaboradores de las decisiones tomadas, creando un clima de confianza y comunicación transversal.
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